Tendencias de conflictividad: Análisis noticioso octubre-diciembre 2005
Por: Santiago Ortiz, Juliana Agredo y Oscar Ospina
Registro de información: Juliana Agredo y Oscar Ospina
Periódicos: La Hora, El Comercio, El Universo
En el último trimestre del 2005 la movilización social e institucional en torno a los problemas locales fue creciente. En este lapso los conflictos territoriales son la mayoría en el total de conflictos del país. La revista Ecuador Debate señaló que este tipo de conflictos llegaron al 44% de conflictividad entre Noviembre del 2004 y Febrero del 2005, mientras que de Marzo a Junio del 2005 llegó a un 43% del total. (Conflictividad socio-política, Marzo Junio 2005, Ecuador Debate 65, Agosto 2005, CAAP, p.41)
Si tomamos en cuenta que hace tres años estos no pasaban del 10% del total, constatamos que los conflictos territoriales han mantenido una tendencia de crecimiento, inclusive por encima de la conflictividad indígena, laboral o urbana acercándose a la mitad del total de conflictos en el país en los últimos tres años
La mayor parte de demandas se dan en torno a transferencias y partidas presupuestarias ante el gobierno central. Buena parte de los conflictos remiten al Estado y este no cuenta con mecanismos institucionales ni propuestas para regular y canalizar los conflictos y por lo general posterga las soluciones. Esta situación permite develar serios vacíos del proceso de descentralización, es decir el crecimiento de los conflictos locales y provinciales está revelando un agotamiento del centralismo, la postergación de reformas de fondo de la estructura estatal y la necesidad de un nuevo esquema de distribución del poder y los recursos en el territorio, ya sea por la vía de una descentralización efectiva o de las autonomías.
Se constata que muchas de las demandas que se dieron ante el gobierno de Gutiérrez, se mantuvieron latentes y se expresaron con fuerza con el Presidente Palacio, el cual necesitaba legitimarse haciendo concesiones a las provincias y ciudades. Es decir la conflictividad tiene que ver también con la debilidad en la administración actual que no tienen soporte político y social ni una voluntad política de ir mas allá de la solución parche. .
A diferencia de otras coyunturas la actual une la movilización social con la activa participación y pronunciamientos de autoridades locales. El descontento a llegado hasta el punto que el CONCOPE y AME, que agrupa a los C. Provinciales y Municipios del país, se han pronunciado por la formulación de una Ley de autonomías que acelere la distribución de poder a nivel territorial.
los hechos de la coyuntura sucedidos en Octubre, Noviembre y Diciembre que tienen que ver tanto con la esfera política como económica. Se debate sobre la reforma del estado a través
LAS TENDENCIAS
En cuanto a la frecuencia de acciones colectivas en cada región (Cuadro 1) se observa que la mayoría se realizan en las provincias de la Costa, en particular en Manabí, Los Ríos, Esmeraldas pero también Guayas y El Oro, con un porcentaje de 54% colocándose por encima de las realizadas en las la provincia de la Sierra que llegan a un 40% Y LA Amazonía, 5%. Hay varios factores detrás de esta tendencia: hay un déficit de acumulado de servicios urbanos en las ciudades, al que se suma la depresión económica en varias provincias como Manabí y Esmeraldas, así como el la reanimación del espíritu anticentralista, pero también a una disputa por la hegemonía política de los partidos en medio del debilitamiento del PRE. Veamos las cifras regionales
CUADRO 1
CONFLICTOS POR REGION[1].Frecuencia Porcentaje Región SIERRA 23 40 COSTA 31 50 AMAZONIA 3 4,9 Sistema 4 6,5 Total 61 100,0
Cuadro 2
CONFLICTOS POR PROVINCIA Total PROVINCIA PICHINCHA 12 IMBABURA 10 GUAYAS 2 EL ORO 2 ESMERALDAS 6 LOJA 1 LOS RIOS 10 MANABI 14 TUNGURAHUA 1 ZAMORA 1 SUCUMBIOS 2 Total 61
Al paro de Chone se suman otras acciones locales como el planteado en Manta ante el gobierno central por la construcción del complejo petroquímico de Jaramijó que para los manabitas representa una oportunidad de desarrollo regional y que le permite a la provincia ganar una posición en el eje estratégico petrolero.
Otra provincia que ha intervenido con una amenaza de paro es El Oro; en este caso en una demanda solidaria de los C. Provinciales del cordón fronterizo conjuntamente con Loja y Zamora, que demandan los recursos del Programa de la Paz, que en el acuerdo con el Perú se firmó luego de la guerra del Cenepa y que prometió una inversión de tres mil millones de dólares que no se ha ejecutado. Sin embargo las tensiones en estas provincias subieron de tono con la quiebra del negocio del Notario Cabrera que generó una ola de incertidumbre en la economía local por las quiebras de varios clientes y la baja del ritmo de consumo, que afectó a sector financiero y comercial. Varias acciones han realizado los afectados y clientes del exNotario que buscan recuperar sus pérdidas.
En Los Ríos, existen diez conflictos tomando en cuenta las acciones de rechazo a la construcción de la represa María del Pilar, en Baba, que se realiza sin consultas a los campesinos de la zona, como las amenazas de paro de las autoridades de esa provincia, por el incumplimiento de la entrega de recursos.
En el caso de la Sierra, la provincia donde hay mas conflictos es Pichincha, donde se encuentra la capital del país y hacia donde históricamente se realizan las movilizaciones registrando 12 conflictos e Imbabura, en donde se han dado varias asambleas cantonales y algunas acciones de corte de vías por el conflicto en torno al canal de agua de Pesillo.
En cuanto a la composición social de los protagonistas las cifran que constan en el Cuadro No. 3 revelan que los pobladores urbanos protagonizan la mayor parte de las acciones colectivas con el 32% del total seguido por los heterogéneos que alcanzan el 13%. Se observa una menor participación de actores rurales, campesinos e indígenas con 6.6% y 11.5% respectivamente. Los actores de los conflictos son sobretodos urbanos y heterogéneos, en lo que se conoce como “fuerzas vivas” en donde intervienen diversos sectores a menudo conducidos por autoridades seccionales. En los conflictos de carácter cívico hay una suma de actores de diversa proveniencia social y territorial que se unen en torno a reivindicaciones de recursos para el conjunto del territorio.
CUADRO 3
ACTORES LOCALESActores Frecuencia Porcentaje CAMPESINOS 4 6,6 INDIGENAS 7 11,5 GREMIOS 1 1,6 ORGANIZACIONES 2 3,3 TRABAJADORES SECTOR PUBLICO 3 4,9 HETEREOGENEOS 8 13,1 TRANSPORTISTAS 2 3,3 POBLADORES URBANOS 20 32,8 JUNTA PARROQUIAL 2 3,3 ALCALDES 6 9,8 PREFECTOS 6 9,8 TOTAL 61 100,0
Elaboración: Boletín Desarrollo Local, FLACSO.
Las demandas fundamentales estuvieron orientadas al conseguimiento de infraestructura, recursos para obras o “abandono estatal” (68,8%). Se trata de luchas por la redistribución de recursos fiscales, ya sea exigiendo el cumplimiento de acuerdos establecidos con el gobierno o para obtener nuevos recursos. En este trimestre las provincias se posicionan para el debate sobre presupuesto en el Congreso que se dio en Noviembre[3]. Apenas 6 de las 61 noticias (9,8%) analizadas tienen que ver explícitamente con temas de participación política y son las informaciones que provienen de las asambleas de Otavalo y Cotacachi, donde una serie de actores se reúnen para dar seguimiento a los planes y las políticas públicas de esas localidades, así como para la rendición de cuentas de las autoridades indígenas.
CUADRO 4
CONFLICTOS POR DEMANDA
Cuando se clasifica las demandas en relación a los campos del desarrollo se repite esta orientación, pues se advierte que la mayor parte de conflictos, un 59%%, se orientan a la infraestructura y un 25% se orientan a temas no tradicionales de los Municipios como la economía, el ambiente o lo social- lo cual señala que la agenda preponderante de los procesos seccionales sigue siendo el cumplimiento de su rol tradicional en la construcción de obras y que los actores locales se van abriendo a una agenda integral del desarrollo. En el campo institucional, político o descentralización hay 9 acciones equivalentes a 14.7%. Frecuencia Porcentaje SALARIOS 3 4,9 PRESUPUESTO 6 9,8 DESTITUCIONES 1 1,6 OBRAS DE INFRAESTRUCTURA 31 50,8 ABANDONO ESTATAL 5 8,2 INCUMPLIMIENTO DE ACUERDOS 2 3,3 PRESTACION DE SERVICIOS 1 1,6 PRIVATIZACIONES 1 1,6 PARTICIPACION POLITICA 6 9,8 LEGISLACION AMBIENTAL 1 1,6 CONFLICTO ARMADO COLOMBIANO 1 1,6 CORRUPCION 1 1,6 TOTAL 61 100,0
CUADRO 5
DEMANDAS POR AREAS DE DESARROLLO Frecuencia Porcentaje % Áreas ECONOMICO 9 14,8 SOCIAL 3 4,9 AMBIENTAL 3 4,9 INFRAESTRUCTURA 36 59,0 POLITICO 6 9,8 INSTITUCIONAL 2 3,3 DESCENTRALIZACION 1 1,6 Total 60 98,4 Sistema 1 1,6 Total 61 100
CUADRO 6
INTERLOCUTORES DE LOS CONFLICTOS Frecuencia Porcentaje Interlocutor GOBIERNO NACIONAL 30 49,0 GOBIERNO PROVINCIAL 11 18,0 GOBIERNO CANTONAL 11 18,0 EMPRESA PRIVADA 1 1,6 EMPRESA PUBLICA 4 6,6 TRASNACIONAL 2 3,2 COMUNIDAD EN GENERAL 1 1,6 Total 60 98,4 Perdidos Sistema 1 1,6 Total 61 100
CUADRO 7
CONFLICTOS SEGÚN FORMAS DE ACCIONFrecuencia Porcentaje MARCHAS 7 11,5 TOMAS 4 6,6 ASAMBLEAS 19 31,1 CESE DE ACTIVIDADES/PAROS 10 16,4 CONCENTRACIONES 4 6,6 AMENAZA 10 16,4 BLOQUEOS 5 8,2 RETENCIÓN DE FUNCIONARIOS 1 1,6 TOTAL 61 100,0
Elaboración: Boletín Desarrollo Local, FLACSO
Hay que señalar que se trata de acciones de baja duración, en la mayor parte menores de un día (61%) y solamente el 21%, llegan a una semana y un 8% llegan a cerca de un mes. Las acciones, por cierto, tiene una larga cadena de peticiones y negociaciones previas y en algunos casos acciones en meses o años anteriores que las explican.
CUADRO 8
DURACION Frecuencia Porcentaje Válidos MENOR DE 1 DIA 40 65,6 MENOR DE 1 SEMANA 13 21,3 MEYOR DE 1 MES 5 8,2 Más de una seman menor de un mes 1 1,6 Total 59 96,7 Perdidos Sistema 2 3,3 Total 61 100,0
En resumen, en el último trimestre del 2005 se eleva la presencia de actores y conflictos locales y regionales, básicamente en la Costa y con base en la población urbana, con formas de acción directa para presionar por partidas y obras al gobierno central. Se revela debilidad del gobierno de Palacio que es aprovechada por las “fuerzas vivas” locales para conseguir sus objetivos. Llama la atención que Quito y Guayaquil negocien directamente “bis a bis” con el Presidente mientras que las provincias con menor capacidad de influencia política deban asumir formas de lucha directa. Es significativo también que pese al largo y tortuoso proceso de descentralización y al debate de las autonomías en el 2000 y en el 2005, no se ha llegado a definir claros canales de negociación al interior del Estado: por ello no es solamente la sociedad civil sino las propias autoridades locales las que se lanzan a las calles.